La marca es lo que hace que las personas elijan a una empresa en lugar de otra. Aun cuando los productos que ofrezcan sean idénticos. El agua sin gas embotellada en un excelente ejemplo de esto. Su aspecto, su sabor y su precio con frecuencia son casi idénticos.
¿Y entonces qué hay en la botella que influya en la decisión de compra que tomamos? En pocas palabras, es porque las marcas nos hacen sentir algo. Una marca nos gusta por la forma en que nos hace sentir. Ya sea la forma en que nos hace sentir a nosotros personalmente o la impresión que genera en otras personas.
Producto: El artículo utilizable que produce la empresa. Marca: La razón para elegir su producto – cómo nos diferenciamos, nuestra identidad y nuestra esencia.
La estrategia de marca tiene que ver con comprender el comportamiento de nuestro negocio y mejorarlo. La estrategia se basa en los principios básicos relativos a por qué y cómo existe nuestra empresa y en entender adecuadamente los aspectos fundamentales. Saber qué representamos y darle vida. Es por eso que decidimos realizar un estudio, tanto interno como externo, para obtener una mirada instantánea de la marca y las percepciones del mercado y, por consiguiente, dónde se debería posicionar en el futuro para impulsar el reconocimiento, la consideración y, en última instancia, la compra.
